Los 7 Pecados Capitales de Mastodon
📡 En el Fediverso no hay algoritmos, pero sí muchas maneras de meter la pata. Aquí te contamos cuáles son y cómo reconocerlos. ¿Preparado para confesarte?
¿Nuevo por aquí? Mastodon es una red social descentralizada, sin algoritmos ni publicidad, donde las normas las marcan las comunidades. Pero ojo: sin algoritmo no significa sin drama…
1. Gula
Seguir a todo lo que se mueve hasta que tu TL parece una rave de bots, memes y gatos anarquistas. Ejemplo: has seguido 200 cuentas en dos días y no recuerdas quién es quién.
2. Pereza
Crear cuenta y desaparecer. Jamás llenar la bio. Leer, lurkear, nunca boostear. Ejemplo: llevas 3 meses sin postear pero sigues entrando solo para ver qué hacen los demás.
3. Envidia
Compararte constantemente. “¿Por qué ese toot tiene 50 favs y el mío solo 1?” Tal vez porque el tuyo es una queja sin contexto. Ejemplo: pasas más tiempo mirando stats que disfrutando las conversaciones.
4. Ira
Pelearte en cada hilo, pedir bloqueos masivos, terminar baneado de tu propia instancia. Ejemplo: entras a los hilos solo para incendiar.
5. Soberbia
Creer que tu instancia es el centro del universo y que todos deberían hacer las cosas a tu manera. Ejemplo: corriges a otros admins aunque nadie te lo pidió.
6. Lujuria
Usar Mastodon como si fuera Tinder. Coquetear en cada reply. CW: sed. Ejemplo: respondes con corazones incluso a toots sobre software libre.
7. Avaricia
Publicar solo para promocionar tus cosas. Sin contexto, sin interacción. Solo enlaces, como un bot que paga el alquiler. Ejemplo: autopromoción constante sin aportar a la comunidad.
Apoya el caos federado
Este servidor no se alimenta de karma, likes ni humo de startup. Se alimenta de electricidad, servidores baratos y café fuerte.
Si te has reído, aprendido algo o simplemente quieres que sigamos gritando contra algoritmos opresores, puedes hacer una donación y ayudarnos a seguir con este experimento rebelde.
Quiero apoyar este caosNuestra tienda rebelde
Visita nuestra tienda de camisetas y merch para lucir tu orgullo fediverso. Porque sí, incluso los anarquistas necesitan ropa.
Quiero mi camiseta rebeldeSi has llegado hasta aquí, enhorabuena: acabas de desbloquear el octavo pecado — procrastinar leyendo artículos de internet.